Frasco de sal de colores.

Hoy hemos pensado que podemos divertirnos con una manualidad muy sencilla. Vamos a rellenar una pequeña botella o frasco de colores, para lo cual vamos a utilizar los siguientes materiales;

-Sal fina.
-Tizas de colores.
-Platos hondos.
-Una hoja de papel.
-Un frasco transparente.
-Un trozo de tela y una cinta.

1º- Echa sal en un plato hondo y con una tiza de color empieza a frotar ésta sobre la sal para que le vaya dando color. Aprieta con fuerza y verás como al cabo de un rato la sal empieza a teñirse de ese color. Repite este proceso por cada color diferente que tengas, siempre en otro plato hondo distinto para no mezclar los colores.

2º-Fabrica un embudo con la hoja de papel procurando que quede una boquilla estrecha. Con mucho cuidado, coloca el embudo dentro del frasco, un poco inclinado y vierte la sal teñida formando una montaña. ¡Qué no quede la sal totalmente llana! Por eso hacemos hincapié en que el embudo esté inclinado.

3º-Escoge otro plato con sal, de otra tonalidad diferente. Poner el embudo de manera que apunte en la dirección opuesta a la última montaña de sal que has echado. Forma una nueva montaña de color.

4º-Repite el paso anterior hasta rellenar el frasco por completo (debe quedar al ras del borde), siempre usando colores diferentes para que tu composición quede más vistosa.

5º-Si has usado un frasco sin tapa, pon film en la parte superior y fijarlo al borde del tarro con una goma elástica. Si tiene tapa sáltate este paso y cierra sin más. Cubre la tapa o el film transparente con un trozo de tela y sujétalo con una lazada echa de tela o con rafia de color